31 octubre, 2013

Me encantan las cajas y los armarios / J'aime les boîtes et coffrets

No hay momento del día en el que una puerta de un armario abierta o un caja de cartón vacía se convierta en un nuevo mundo para Mishy Mishy y se distraiga jugando mientras entra, sale, o como en esta ocasión se quede dentro y comience a dormir como un tronco.



Las cajas de cartón queda definitivamente claro que le "pirran" y que sea de la marca que sea, ya sea de frutas, magdalenas o incluso las que algunas marcas dejan en sus packs de leche, de 6 normalmente, es el momento ideal para meterse, inspeccionar el terreno y quedarse como lo véis..... totalmente agusto.... lógicamente esto sucede si compartimos el mismo espacio, o sea, estando yo en esa habitación pues se queda ahí, pero en cuanto me voy a otro lado se viene conmigo también.




Mira que he comprado juguetes de marcas y de tiendas especializadas en animales pero donde esté una caja de cartón o un plástico o hasta incluso una bolsa de basura, ahí tiene diversión para un buen rato y eso es lo que me apetece que tenga muchas veces y durante muchos momentos del día, no me gusta verlo sin alicientes, sin juegos, sin que una esquina de la casa se convierta en un momento de juegos entre él y yo, o coger el primer objeto que tenga en mi bolsillo y asomarlo por una puerta y llamar su atención de cazador para que venga a capturarlo pegando saltos o dándole con la patita.

Los juegos con los gatos no tienen nada que ver con el de los perros, fundamentalmente porque los canes llevan muchos más miles de años con los humanos siendo mascotas y han aprendido a relacionarse de una forma más directa, mientras que los gatos como bien sabéis no llevan tantos miles de años siendo mascotas, dado que antes eran considerados animales rapaces como lo eran los lobos o los jabalíes, hasta que los Egipcios los adiestraron para la caza y poco a poco fueron siendo parte de nuestra vida, limpiando la casa y las zonas agrícolas de ratones, ratas, pájaros en exceso de población, serpientes y toda alimañana que se acerque a una zona humana de residencia.